Los discos duros desaparecerán en 2028, según Pure Storage

Con el paso del tiempo los discos duros han ido quedando cada vez más en segundo plano. Esto ha ocurrido principalmente por el empuje de las unidades SSD, un tipo de soluciones de almacenamiento que ofrece ventajas muy importantes frente a los discos duros tradicionales, y que van más allá del rendimiento y de la fiabilidad.

Las unidades SSD no contienen partes móviles, es decir, no cuentan con elementos mecánicos. Están formados por chips de memoria NAND Flash, algunos cuentan también con memoria DRAM trabajando como caché, y vienen con diferentes controladoras que ofrecen niveles de rendimiento muy distintos. Esto ya se traduce en un diseño más fiable y menos sensible a cosas tan sencillas como los movimientos y las vibraciones.

Los SSD ofrecen un rendimiento muy superior, tienen tiempos de acceso y latencias mucho menores, y su consumo es claramente inferior, lo que al final hace que superen a las unidades HDD en casi todos los frentes posibles. Solo hay uno donde estos últimos llevan todavía la delantera, el coste por gigabyte, pero este se ha ido ajustando notablemente en los últimos años, y al final esa diferencia va quedando cada vez más diluida gracias a las ventajas de los SSD que ya hemos citado.

Según Shawn Rosemarin, vicepresidente de I+D en la división de ingeniería de clientes de Pure Storage, los discos duros tienen los días contados, hasta tal punto que cree que en 2028 las ventas de este tipo de unidades de almacenamiento cesarán por completo, y que toda la industria tecnológica pasará a utilizar únicamente unidades de almacenamiento SSD.

La verdad es que en los últimos años se ha producido una caída importante en la popularidad de este tipo de unidades, y a Shawn no le falta razón cuando dice que el menor consumo eléctrico de los SSD representa una ventaja tan importante de cara al coste de propiedad que, al final, permite rentabilizar la mayor inversión realizada en unidades SSD. Con todo, creo que su predicción peca de ambiciosa, y que los HDDs no van a desaparecer en cinco años, de hecho para 2027 se espera la llegada de unidades con una capacidad de 40 TB.

Este tipo de unidades siguen teniendo un peso importante en el sector profesional, especialmente cuando hablamos de almacenamiento en frío, y su bajo coste por gigabyte sigue siendo una ventaja muy importante a la hora de afrontar numerosos proyectos, una realidad que no va a cambiar en cinco años. Por otro lado, en el sector de consumo general también mantienen un valor notable, especialmente cuando se utilizan en NAS o como unidad secundaria junto a un SSD.