Qualcomm y Google se unen para producir chips RISC-V y mejorar Wear OS

Después de que Google anunciase en enero que Android comenzaría a dar soporte a la arquitectura RISC-V, ahora se ha hecho público un nuevo acuerdo mediante el cual Qualcomm se aliará con la compañía para fabricar dispositivos portátiles, como relojes inteligentes, gracias a estos innovadores chips.

Esta tecnología Open Source ha ganado peso en los últimos años e incluso podría suponer una clara amenaza para ARM. RISC-V se puede utilizar como ingrediente esencial para procesadores avanzados de IA o un teléfono inteligente.

Pese a las tensiones geopolíticas y de exportación entre China y EEUU, todo hace indicar que Qualcomm podría estar trabajando en una solución portátil basada en RISC-V a nivel mundial. De este modo, se podrá crear un ecosistema de software robusto y una enorme cantidad de aplicaciones, todo ello con gran rendimiento y un bajo consumo de energía.

A través de la nueva plataforma Snapdragon Wear de Qualcomm, la colaboración con Google se hará extensible a los dispositivos Wear OS. Esta alternativa de código abierto podría incluso hacerse extensible a procesadores personalizados de bajo consumo y alto rendimiento. A diferencia de ARM, RISC-V es una tecnología más barata y flexible, por lo que no requiere el abono de royalties.

Tanto Google como Qualcomm comparten la idea de que otros fabricantes comenzarán a ingresar al sector al haber inaugurado el camino de adoptar la tecnología RISC-V a los relojes inteligentes. Por consiguiente, se ganará una gran escalabilidad en toda la cadena de valor.

Por su parte, la situación para la británica ARM se complica, a la que se le suma este nuevo avance a otros problemas como la venta vetada a NVIDIA, la mala situación económica interna de su división china y la delicada posición de sus partners. Sin ir más lejos, hace unos meses demandó a Qualcomm tras hacerse con Nuvia.

Desde Qualcomm auguran que las primeras soluciones basadas en esta combinación de software y hardware no llegarán hasta más adelante, tal vez, en los primeros meses del próximo año 2024. A nivel global se podrán adquirir estos nuevos y eficientes smartwaches con procesadores RISC-V.

El avance que supone RISC-V

Pese a ser una auténtica revolución, es importante ser optimistas, ya que los diseños RISC-V aún se encuentran lejos de poder compararse con el elevado rendimiento y eficiencia que presenta ARM. Además, Android aún debe trabajar mucho para ser 100% compatible con RISC-V.

RISC-V se presenta como una serie de normas de diseño para los chips de ordenador, de tal modo que cualquier persona podrá intervenir en este código abierto para desarrollar sus estándares.

Las bases de RISC-V fueron desarrolladas por un grupo de científicos informáticos de UC Berkeley (EEUU) en 2010 para el diseño de chips. No obstante, las CPU eran demasiado complejas y opacas. De ahí que lo hiciesen público para recibir ayuda y en 2015 un grupo de instituciones académicas y empresas (entre ellas Google e IBM) fundaron RISC-V International.

La versión más básica de RISC-V consta de 47 instrucciones, entre los cuales destacan comandos para sacar un número de la memoria y sumar otros números. También presenta extensiones que permiten agregar funciones como matemática vectorial y ejecutar algoritmos de IA. Gracias a RISC-V existe una gran libertad de crear un hardware personalizado basado en aplicaciones.

Wear OS 4, el gran beneficiado

Tras el lanzamiento de de este nuevo wearable, Google cuenta con Qualcomm como gran aliado para mejorar su sistema operativo con estructuras necesarias para que terceros puedan personalizar los chips de sus relojes, ampliar el rendimiento y reducir los tiempos de comercialización.

Como gran problema, la lentitud en las actualizaciones. Y es que la fragmentación en este sistema es uno de sus hándicaps. Con RISC-V se permite ampliar el marco en el que los fabricantes de terceros pueden aprovecharse de chips personalizados que son eficientes en términos energéticos y ofrecen un elevado rendimiento. No es de extrañar que otras marchas se sumen al diseño de otros wearables con esta tecnología, e incluso con otros dispositivos para mejorar el ecosistema.

Su disposición es muy similar a la del Wear OS 3, aunque cuenta con novedades. Es mucho más personalizable y presente un nuevo formato de esferas de reloj que permitirá su creación y venta mediante Google Play Store.