Google y UNICEF, unidos contra el zika

El control de epidemias es algo que preocupa al ser humano prácticamente desde el momento mismo en que fue consciente de la existencia de enfermedades que se podían transmitir de una persona a otra. Y no es para menos, a lo largo de la historia de la humanidad, ésta se ha visto azotada en varias ocasiones por patógenos con muy malas intenciones. Nombres como gripe española o viruela en el pasado, o ébola o zika en el presente, son la fuente de grandes preocupaciones y no menos enormes esfuerzos para luchar contra los riesgos de su difusión.

En esta lucha toda ayuda es bienvenida, así que cabe entender que UNICEF haya recibido con los brazos abiertos la ayuda ofrecida por Google que, según informa hoy la Agencia Reuters, va a establecer varios cauces de colaboración con el organismo adscrito a la ONU. El primero y más inmediato es la donación de un millón de dólares a la entidad, dinero que irá destinado principalmente a financiar todas las actividades llevadas a cabo por sus voluntarios en las regiones de especial propagación de la enfermedad (principalmente latinoamérica).

Por otra parte, la empresa del grupo Alphabet pondrá a trabajar a parte de su equipo (todos participan en el mismo de manera voluntaria) integrado por ingenieros, diseñadores y científicos de datos, un perfil profesional que está ganando muchísima relevancia estos últimos años. El objetivo de su trabajo es analizar toda la información relacionada con el zika, con el fin de detectar patrones relacionados con su difusión. El objetivo, claro, es prevenir futuros brotes y, de esta manera, intentar contener lo que ya ha sido declarado por la Organización Mundial de la Salud como emergencia global de salud.

Aunque los síntomas del zika en adultos sanos son leves, ya se ha establecido una correlación entre esta enfermedad y el nacimiento de más de 4.800 niños con microcefalia, por lo que a espera de que se confirme la relación causal, urge tomar medidas para evitar el terrible riesgo que supone para las mujeres en estado de gestación. Y es que poder anticipar dónde se producirán los próximos brotes, permite que se tomen medidas preventivas en los mismos.

Imagen: Centers for Disease Control and Prevention