Hyperloop prueba su potencia en el desierto de Nevada

La primera prueba del tren ultraveloz Hyperloop, realizada ayer en el Desierto de Nevada (EEUU) ha concluido con éxito, según han confirmado a Reuters los responsables de la compañía Hyperloop One. Conocida hasta ahora como Hyperloop Technologies, es solo una de las entidades que está centrada en el desarrollo de este medio de transporte ultraveloz, ideado hace unos años por Elon Musk, fundador de Space X y Tesla Motors. Brogan BamBrogan, uno de sus fundadores, ha calificado esto como un gran hito, dada la dificultad de este tipo de operaciones: «La prueba de tecnologías en desarrollo puede ser una tarea complicada. Nunca se sabe si el día elegido las cosas van a funcionar exactamente como quieres«.

En este prueba, un vehículo del tamaño de un coche, y parecido a un trineo, se ha desplazado durante una hora por una pista especial con electroimanes construida para la ocasión. Comenzó desplazándose por una vía de tren y luego se aumentó su velocidad gracias a los electroimanes y a la electricidad enviada a bobinas de cobre. Después de un corto recorrido, el vehículo se detuvo al entrar en una zona preparada con arena. Si todo va bien, en otras pruebas que están previstas para dentro de un año, este coche debería levitar y llevar cabinas de pasajeros.

El vehículo ha llegado a alcanzar los 160 kilómetros por hora, que se ha considerado una velocidad adecuada y satisfactoria por ahora. No obstante, cuando finalmente se construya el Hyperloop para transportar pasajeros de San Francisco a Los Ángeles, la velocidad que alcanzará será muchísimo mayor: unos 1.200 kilómetros por hora.

Eso sí, todavía se desconoce cuándo entrará en funcionamiento. Desde luego, no será a corto plazo, porque construirlo y ponerlo en marcha no son tareas fáciles. Según las fechas que ha dado su CEO, Rob Lloyd, está previsto que el transporte de mercancías mediante Hyperloop comience en 2019, y el de pasajeros se retrasará hasta 2021. Pero podrían variar.

Por ahora, lo que marcha viento en popa es la financiación del proyecto. A las cantidades que ha conseguido hasta ahora Hyperloop One se unen los 80 millones de dólares que acaban de conseguir de inversores como Khosla Ventures y GE Ventures, así como de la Compañía Nacional de Ferrocarriles de Francia y del constructor de vías férreas de alta velocidad SNCF.