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Opinión

La Administración desde dentro: ¿en qué organismos de normalización puedo confiar?

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dudas

Miríadas de artefactos interconectados comunicándose en tiempo real. Así es el mundo digital en el que nos movemos y en donde los lenguajes de programación nacen, crecen, se reproducen y (solo unos pocos) mueren en favor de otros aún más especializados. ¿Cómo entenderse en esta torre de Babel electrónica? La única manera es mediante la normalización, es decir, acordando que todos los participantes en las comunicaciones sigan las mismas especificaciones técnicas.

En este caldo de cultivo electrónico han aparecido un sinfín de organismos de normalización en todos los ámbitos: nacionales, europeos, internacionales… Empecemos por estos últimos. Sin duda alguna, hay que resaltar estos tres: ISO, IEC e ITU. La ISO (International Standard for Organisation) es una organización no gubernamental e independiente con más de 163 miembros nacionales que ha publicado más de 21.000 estándares internacionales. Abarca casi cualquier ámbito excepto la electrotecnia y las telecomunicaciones para las que existen la IEC y la ITU. La IEC (International Electrotechnical Commision) se centra en la electrotecnología a través de casi 20.000 expertos asociados a la misma. Lleva 110 años de vida y sigue siendo un referente en el mundo de la tecnología y la electrónica. Finalmente, la ITU es el “organismo especializado de las Naciones Unidas para las Tecnologías de la Información y la Comunicación”. Fue fundada en 1968 y se centra, esencialmente, en el espectro radioeléctrico y las órbitas de satélite a escala mundial.

En Europa, ¿cuáles son los organismos de normalización más importantes? CEN, CENELEC y ETSI serían los equivalentes al ISO, IEC e ITU, respectivamente. El CEN (European Committee for Standardization)  publica Normas Europeas sobre múltiples ámbitos y está compuesto por 33 países miembros. El CENELEC (European Committee for Electrotechnical Standardization) se focaliza en el campo de la ingeniería electrotécnica. Finalmente, la ETSI (European Telecommunications Standards Institute) “produce estándares globalmente aplicables en el campo de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones incluyendo comunicaciones móviles, fijas, radio, difusión e internet”.

¿Y en España?

El organismo normalizador es AENOR:

«La Asociación Española de Normalización y Certificación es una entidad privada sin fines lucrativos que se creó en 1986. Su actividad contribuye a mejorar la calidad y competitividad de las empresas, sus productos y servicios. […]Es el organismo legalmente responsable del desarrollo y difusión de las normas técnicas en España. […]AENOR pone a disposición de todos uno de los catálogos más completos, con más de 28.900 documentos. AENOR se sitúa entre las 10 certificadoras más importantes del mundo. […] Desarrolla también una potente actividad editorial, diseña software para la gestión de sistemas, imparte formación especializada y ofrece distintos servicios de información».

AENOR es el representante español en la mayoría de los organismos internacionales y europeos mencionados más arriba.

¿En quién puedo confiar?

En la mayoría de los problemas tecnológicos aparecen también cuestiones de confianza. Por ello nace el ENAC (Entidad Nacional de Acreditación) cuya misión es “generar confianza en el mercado y en la sociedad en general en relación con la competencia técnica de los evaluadores de la conformidad acreditados, contribuyendo así a la seguridad y el bienestar de las personas, la calidad de los productos y servicios y la protección del medioambiente, y con ello al aumento de la competitividad de los productos y servicios españoles y a una disminución de los costes para la sociedad debidos a estas actividades”. En su web se puede consultar el listado de organismos acreditados y, entre ellos, se encuentra AENOR. Pueden descargarse los certificados sectoriales (por ejemplo, sobre Proyectos de I + D + i donde, entre otras cosas, se detalla documentos según los cuales se certifica).

En un mundo cada vez más complejo e interconectado es imprescindible hablar los mismos idiomas y formatos. Para ello, es necesario consensuar unos estándares y seguirlos. De ahí la importancia cada vez mayor de los organismos de normalización y de acreditación como la ISO, el CEN, y, en clave nacional, AENOR.

javier gonzalezJavier González. Ingeniero en informática (UCM). Máster en Filosofía Teórica y Práctica con especialidad en lógica, historia y filosofía de la ciencia (UNED). Funcionario por oposición al Cuerpo de Gestión de Sistemas e Informática de la Administración del Estado. Jefe de servicio en la División de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones del Ministerio de Justicia. Autor del libro “ÉTICA DIGITAL” y del blog “Ética y Administración”. Twitter: @Etica_Admon. Facebook: Ética y Administración.

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