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Amazon quiere reducir costes ajustando el tamaño de los envíos

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La compañía que dirige Jeff Bezos cerró el segundo trimestre de 2019 con una subida de ingresos del 20%, una cifra que ha debido saberle a poco, ya que Amazon ha confirmado que adoptará nuevas medidas para reducir costes e incrementar los ingresos.

Para conseguir ese objetivo Amazon se centrará en la paquetería. A partir del día 3 de septiembre la compañía introducirá una nueva política de envíos que afectará, sin excepción, a todos los vendedores que operan en su plataforma de comercio electrónico.

La entrada en vigor de esta nueva política estaba prevista para hoy mismo, pero Amazon ha decidido extender el plazo para dar más tiempo a los vendedores y permitirles adoptar las medidas necesarias para su cumplimiento.

Esta nueva política implica un cambio importante, y es que los envíos deben realizarse en paquetes que tengan un tamaño suficiente para albergar de forma segura cada mercancía. Lo dicho implica varias cosas importantes:

  • No pueden utilizarse paquetes excesivamente grandes para mercancías muy pequeñas. Por ejemplo, meter una memoria USB en una caja grande supondría incumplir las nuevas políticas.
  • Los envíos deben estar debidamente protegidos. Puede que esto implique utilizar una caja mayor de lo estrictamente necesario, pero si es razonable no supondría un incumplimiento.
  • Deben utilizarse empaquetados funcionales, es decir, que permitan transportar debidamente las mercancías que albergan. Por ejemplo, si un producto es pesado debe ofrecer un agarre razonable.

El objetivo de Amazon es reducir los costes que representa el envío de paquetes y maximizar los beneficios por venta. Al mismo tiempo la compañía ha reconocido que también quiere limitar los materiales de desecho que se generan con cada pedido.

Para animar a los vendedores a cumplir con esta nueva normativa Amazon ha confirmado que impondrá un recargo de 1,99 dólares por envío que haga caso omiso, y que dará un crédito de 1 dólar por cada envío que se ajuste debidamente a ella.

Amazon ha estado en más de una ocasión en el ojo del huracán por las acusaciones que había recibido en relación a un trato desfavorable hacia aquellos que venden a través de su plataforma. Con esta nueva política la compañía ha tomado la decisión correcta, ya que ofrecen tanto una pequeña sanción a los que no cumplan esa nueva normativa como una compensación a los que sí lo hagan. No se ha limitado a jugar de «poli malo», y eso ha sido todo un acierto.

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