Conecta con nosotros

Noticias

Qué debo saber para comprar un televisor 4K

Publicado el

Televisor

Black Friday, Cyber Monday, Navidad, rebajas… ya estamos plenamente inmersos en una espiral de compras de la que no saldremos hasta, aproximadamente… nunca. Y es que las oportunidades de adquirir aquellos productos que necesitamos y/o queremos (una frontera cada vez más difusa) crecen año tras año, casi hasta llegar a una situación de constantes rebajas. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta algunos aspectos clave antes de aprovechar el primer chollo que encontremos, ya sea en Internet o en una tienda, centro comercial, supermercado, etcétera. Y es que, en ocasiones, un buen precio puede cegarnos, y hacer que no veamos algunos aspectos clave que, en realidad, son fundamnetales a la hora de decidir si un producto nos interesa o no. A este respecto, y si estás pensando en sustituir tu viejo o tu «viejo» televisor por una flamante pantalla 4K, CNBC ha publicado una interesante guía con algunos puntos clave para acertar en esta compra.

Pero, antes de ello, es fundamental que tengamos muy claro que es un televisor 4K. Y es que, en contra de la creencia más común, no se trata de una resolución concreta, sino de diversas variantes que tienen alrededor de 4.000 píxeles de resolución horizontal. Dentro de los mismos, el más común es 3.840 x 2.160 (el doble de resolución que 1.080p), lo que arroja un total de 8.294.400 puntos. Es importante, por lo tanto, que cuando vemos etiquetas y reclamos en los que se habla de alta y muy alta resolución, que busquemos el valor concreto de resolución (horizontal y vertical) para asegurarnos de que realmente vamos a disfrutar de un televisor con la resolución 4K por la que vamos a pagar (aunque sea a precio de oferta).

Otro aspecto al que debemos dedicar atención es a su conectividad. Es común, por ejemplo, comprar un televisor y, al llegar a casa y querer conectarlo con nuestros dispositivos, descubrir que no cuenta con todos los conectores HDMI que necesitamos. Consolas, reproductores, dispositivos como Google Chrome, otros de acceso a la oferta de contenidos de nuestro proveedor de telefonía e Internet… a veces se nos olvida la enorme cantidad de cacharros inteligentes que tenemos conectados a la caja tonta. Así, lo recomendable es un mínimo de tres, o mejor aún cuatro. Con dos seguramente tardaremos poco tiempo en tener que empezar a desconectar unos y conectar otros. Y en cuanto a los televisores con un solo conector HDMI, solo se me ocurre responder «Perdoooooona»? Sí, como en la campaña por el aceite de oliva. Igual de inaceptable.

Atención a estas tres letras: HDR (importante, no lo confundas con HD Ready o estarás comprando una tele de, al menos, hace diez años). Significan alto rango dinámico (High Dynamic Range) y… ¿has visto esas fotografías en las que tanto los elementos más oscuros como los más luminosos se ven perfectamente? Hay varias maneras de lograr este efecto, pero lo que verdaderamente nos interesa aquí y ahora es que hablamos de una técnica que, poco a poco, se empieza a aplicar a producciones audiovisuales. La mala noticia es que, por norma general, los televisores 4K «tirados de precio» no soportan esta tecnología, por lo que no podremos disfrutar de la calidad de imagen que está por llegar.

Y aún hay más aspectos: frecuencia de refresco (por debajo de 120 hercios se nos puede quedar corto), conectividad a Internet (wifi, sin duda, salvo que tengas el televisor junto al router), sus funciones de SmartTV… y de nuevo una mala noticia: si lo quieres todo (y lo lógico es que lo quieras, claro), olvídate de los chollos de 300-400 euros. Por ese precio encontrarás televisores 4K, sí, pero no podrás disponer de una pantalla de última generación y con todas las prestaciones que, normalmente, asociamos a una tele 4K. ¿Mi consejo? Revisa bien tus prioridades, busca una tele que realmente se ajuste a las mismas y, si es necesario, paga un poco más. Ese aumento en el coste lo verás compensado, sin ninguna duda, porque será tu televisor durante bastante más tiempo. Y no hablo de semanas o meses, claro, me refiero a que esta diferencia puede hacer que estés totalmente satisfecho con ella durante unos cuantos más años. Algo que, al final, se traducirá en un buen ahorro.

 

Imagen: Tebielyc

Lo más leído