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¿Sabes cómo convertirte en un gran científico de datos?

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En los últimos 20 años, el número de datos que las personas y las máquinas generamos se ha multiplicado por miles de millones y, pese a que existe tecnología para tratarlos y procesarlos, lo que falta es talento humano que sea capaz de exprimirlos al máximo. Esto ha motivado que el de científico de datos, se haya convertido en uno de los perfiles profesionales más demandados en la actualidad por las grandes empresas. 

De hecho, la falta de expertos que actualmente hay en esta materia ya provoca que actualmente la demanda de este tipo de profesionales supere ampliamente la oferta, por lo que en los últimos años, se han multiplicado los cursos de analista de datos. ¿Pero cómo es exactamente ese perfil que buscan las empresas y qué cualidades debería tener un profesional para no solo entender los datos sino comprender cómo pueden mejorar el trabajo dentro de su organización?

En primer lugar, el data scientist tiene que tener sólidos conocimientos sobre el sector en el que se mueve, entender exactamente cómo es la cultura corporativa de su empresa y cuál o cuáles son los principales problemas/desafíos que los que hay que prestar atención.

Además es una persona que entiende cuáles son las necesidades reales de la empresa en la que trabaja y cómo sus compañeros podrían sacar el máximo partido de los datos con los que se relacionan a diario. Es un profesional que sabe escuchar y que presta mucha atención al input que le llega desde distintos departamentos y encuentra nuevas fuentes de información que le ayudan a mejorar en su trabajo.

Mantiene una mente abierta, y una actitud que le permite enfocar los problemas desde una perspectiva nueva, en la que no intervienen únicamente los datos de su organización, sino que en la que también pueden jugar un papel decisivo fuentes de datos e información externa.

Es creativo desde luego, pero tiene que tener un sólido conocimiento base y dominar los KPI’s básicos de su compañía, para alinearlos en una estrategia que cumpla con los objetivos propuestos. La creatividad y entender “lo que no siempre cuentan los datos” siempre es bienvenido, mientras que cumpla con la condición de tener en cuenta el «core business» de la organización.

Finalmente, no intenta reinventar la rueda. En ocasiones las empresas pasan meses trabajando en proyectos «secretos» para acabar descubriendo tarde o temprano, que había otra persona que ya había desarrollado una solución para el problema  al que se estaban enfrentando.  Y en ocasiones esas soluciones son de fácil acceso, tanto que incluso pueden encontrarse en Internet en pocos minutos. Antes de empezar a trabajar es mucho mejor informarse sobre lo que ya hay.

Buena parte de este perfil viene por supuesto “de serie” en las inquietudes que desarrolla el profesional a lo largo de su carrera. La mayor parte sin embargo, especialmente en las áreas más técnicas, acaba por adquirirse en cursos especializados que permiten convertirse en un gran científico de datos, al familiarizarse con el trabajo de distintos lenguajes de programación, Inteligencia Artificial, o Big Data.

Concluimos que la profesión del data scientist  se ha convertido en una de las más dinámicas del mundo de la tecnología, y una en la que todavía hay mucho camino que recorrer y en el que la demanda de nuevos profesionales no para de crecer. ¿Te gustaría convertirte en uno?

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