Reino Unido contempla eliminar por completo el uso del fax

¡F5…tocado! ¡F6…hundido! Así de fácil se está evaporando el uso de uno de los elementos de oficinas esenciales, por no decir el principal de los años ochenta en todo el mundo; el fax. Si primero fueron los planes del gobierno japonés para ir aboliendo el uso del fax como estándar para el envío de documentos, ahora es el turno de Reino Unido.

Un aparato que ha ido cayendo en desuso, adelantado por las nuevas tecnologías: ordenadores, smartphones, tablets… no han hecho otra cosa que relegar al fax a un objeto casi de coleccionista, de objeto de decoración o como una reliquia para venderlo en páginas de compra-venta de segunda mano.

Si preguntásemos a las nuevas generaciones, seguramente dirían que no saben lo que es ni lo han usado nunca. Incluso si se les explica cuál es su uso se preguntarían, ¿pero no existe para eso el correo electrónico? De hecho, solo los clubes de fútbol en el mercado de fichajes envían la documentación de los futbolistas a través de fax a las oficinas de sus respectivas ligas. Quitando ese uso, ¿alguien conoce algún otro?

La Oficina de Comunicaciones de Reino Unido (Ofcom) ha emitido un estudio en el que respalda plenamente la decisión del gobierno de eliminar el requisito de los servicios de fax, teniendo como fundamento la legislación de la Orden de Servicio Universal (USO), como servicio telefónico disponible para los ciudadanos de Reino Unido a un precio asequible. Hay dos proveedores de telecomunicaciones designados responsables del servicio universal en el Reino Unido: BT y KCOM -solo en el área de Hull-.

El pasado martes saltaba la noticia y el gobierno modificaba la Orden de Comunicaciones Electrónicas (Servicio Universal) de 2023, trabajando por eliminar todos los servicios de fax de la USO en fechas próximas.

Las nuevas tecnologías han arrinconado el uso del fax

La Ofcom realizó un estudio de mercado y abrió una ventana para que aquellos nostálgicos y enamorados del fax pudiesen exponer su caso particular por el cual consideraban que esta máquina era indispensable. Pero solo se dieron trece respuestas en dos meses, de los cuales nueve acordaron que debería relegado al cementerio tecnológico.

A pesar de todo, dos encuestados del organismo comercial del Consejo de Comunicaciones del Reino Unido y un particular aseguraron que el fax debía seguir integrado en el día a día, pues había empresas, especialmente del sector legal, médico y turístico, que seguían utilizándolo. También hay que tener en cuenta a las personas que dependen de otras aplicaciones de datos en banda de voz, como las alarmas de teleasistencia para personas mayores o vulnerables. ¡Es el último eslabón que le queda al fax para aferrarse a la vida!

El objetivo de la Orden de Servicio Universal es asegurar que aquellas personas de áreas remotas o rurales, consumidores vulnerables o usuarios que precisan de asesoramiento por dispositivos de teleasistencia pudiesen tener acceso al fax. Ya que si no tienen forma de acceder de otro modo al mercado de la telefonía de protocolo de Internet (IP), estos sectores poblacionales quedarían excluidos socio-económicamente.

De hecho, en las décadas de 1980-1990, la empresa que no dispusiese de un fax era una empresa anticuada y no a la vanguardia. Hasta principios del siglo XXI su sonido se convirtió en el día a día de millones de trabajadores de todo el mundo. Ahora, con la evolución incesante de la telefonía y de Internet, las máquinas de fax ya no funcionarían de la misma manera, por no hablar de que se han convertido en elementos obsoletos e inútiles.

No obstante, ante la enorme cantidad de alternativas que presenta el mercado como el correo electrónico o las plataformas de gestión de documentos en línea (muchas de ellas gratuitas), para la Ofcom carece de sentido que el suministro de fax siga formando parte de los servicios de telefonía de obligación universal.