España cerró 2022 con 124.400 puestos de trabajo digitales sin cubrir

La digitalización sigue creciendo a un ritmo frenético e irrumpiendo en todos los sectores económicos. España continúa siendo líder indiscutible en conectividad, ocupando el puesto número siete del Índice de la Economía y la Sociedad Digitales (DESI) que elabora anualmente la Comisión Europea.

Solo se ve superada en este sentido por Finlandia, Dinamarca, Países Bajos, Suecia, Irlanda y Malta. Algunos de estos países también se posicionan por delante en los servicios de fibra, donde España ocupa la cuarta posición con una cobertura del 93,8%. Un dato importante teniendo en cuenta que la media del conjunto de la UE es del 70,2%. Todo ello es debido a las grandes inversiones en 5G realizadas por el país, pues Telefónica cerró el año pasado con 1.719 municipios con 5G, es decir, una cobertura superior al 83% de la población.

A pesar de estos datos, el fin de la pandemia, y por ende del teletrabajo, parece que ha mermado especialmente a la digitalización y a la creación de puestos de trabajo altamente cualificados. Así lo recoge el informe anual ‘La Sociedad Digital en España 2023’ elaborado por Fundación Telefónica y presentado el pasado 25 de abril. Actualmente existen 124.400 vacantes de perfiles digitales libres en las empresas y un descenso del teletrabajo al 12%, por debajo del 17,6% registrado en 2021.

Los datos aportados recientemente por Eurostat revelan que el número de especialistas TIC creció en la UE un 50% entre 2020 y 2021, ocho veces más que el crecimiento general del empleo de la zona. De igual modo, uno de cada cuatro empleos generados en España en el año 2020 estuvo relacionado con la ciencia y la innovación.

España, que ocupa el puesto 10 del ranking mundial en ciencia y el 30 en innovación, es consciente de que los sectores en los que existe una mayor oferta de empleo son los relacionados con software, sistemas y ciberseguridad. A esto se le suma que, quienes logran encontrar a trabajadores para dichos puestos, se dan cuenta de que en el 43% de los casos cuentan con una cualificación digital insuficiente.

Con respecto al teletrabajo, después de que durante la pandemia de 2020 se alcanzasen picos del 20%, en 2021 se redujo la tasa al 17,6%, y conforme se ha ido recuperando la normalidad ésta se ha ido reduciendo. No obstante, sigue por encima del 5% que se contabilizó en 2019. Los mayores descensos de teletrabajo se han registrado en las pequeñas empresas.

La solución más eficaz

El proceso de digitalización de un país se consigue a partir del talento digital, la construcción de un internet seguro libre de ciberamenazas y la innovación en educación. En este sentido, son muchas las voces de expertos que reflejan la necesidad de introducir en todos los niveles educativos la asignatura de programación informática. Así se lograría preparar en estas habilidades tecnológicas a profesionales del futuro que no son estrictamente digitales.

El uso de internet en la sociedad

Actualmente, las empresas abogan por la Web3 y el internet inmersivo, el blockchain, la industria 4.0 con un avance de la automatización y los drones como solución eficaz en base a la economía digital y al desarrollo social. No obstante, la inteligencia artificial sigue consolidándose como la opción preferida al multiplicar su velocidad de aprendizaje por 100 millones en diez años.

El 79,7% de las personas entre 16 y 74 años utilizaron webs o aplicaciones móviles de alguna institución. De hecho, el 66,3% de la población mundial se declaró usuario de Internet durante 2022 (3,7 puntos más que en el año anterior). De esos 5.280 millones de personas, el 69,2% eran hombres y el 63,4% mujeres.

Aunque los servicios vinculados al entretenimiento son los que triunfan entre los españoles, el comercio electrónico también se ha mantenido durante 2022 en muy buenas cifras, pues el porcentaje de personas que compró por Internet en los últimos tres meses fue del 55,3%, una décima más que en 2021. A pesar de todo, el gasto por usuario se redujo, volviendo a cifras similares a 2019.

La banca online experimento un crecimiento en 2022, pues el 73,7% de los usuarios de Internet accedió en los últimos tres meses a servicios bancarios online, lo que supone un 6,2% más que en 2021.

El papel preferente de Europa

Si analizamos la distribución geográfica, Europa, las repúblicas exsoviéticas y América superan el 80% de los usuarios, mientras que en África no se alcanza ni el 40%, donde además la brecha de género representa una diferencia de 11,5 puntos en favor de los hombres.

El Informe también apunta que seis grandes compañías concentran más de la mitad del tráfico de datos de las redes, aunque no pagan nada por usar su capacidad, lo que supone mayores costes para los operadores de redes en la UE. A las grandes tecnológicas como Netflix, Google o Meta se les exige una concienciación sostenible. Por todo ello, desde Telefónica, se insiste en la necesidad de establecer una propuesta regulatoria que controle el ecosistema digital, donde el pago fuese en función del tráfico.