HTC amplía sus horizontes

HTC, la abanderada del diseño en los smartphones Android, fue fundada en 1997 y se definía como «diseñador y fabricante tras bambalinas de muchos de los dispositivos móviles de marca OEM más populares del mercado«. En 2006 dieron el salto al mercado con sus propios teléfonos y desde entonces el consumidor siempre ha sido la meta a la que dirigirse, un «compromiso que define a la compañía«.

HTC fue de las mejores y lo demostraba con sus innovadores smartphones en un mercado donde se encontraba Samsung, LG, Motorola y la ya desaparecida Sony Ericsson. Mientras, HTC primaba su diseño, cuidaba los detalles y revolucionaba el panorama Android con su Interfaz HTC Sense. La competencia se movía rápido. Samsung corría, LG tenía la suerte de no jugárselo todo al móvil y Sony por su parte se divorciaba de Ericsson y presentaba una nueva línea Xperia. En el lado malo de las cosas: Motorola caía entre pleitos y malas ventas y solo podría ser salvada con la cartera de Google. Nokia, la líder, los grandes, los primeros, empezaba a perderlo todo.

Mientras tanto en este panorama llegaban los chinos, los otros, los pequeños. Los que pensaron (acertadamente) que no hacía falta gastarse más de 300 euros para tener un buen móvil. Así Huawei, ZTE y (ahora) Xiaomi, empezaron a comerse el terreno de la gama baja y media.

En este escenario, HTC superaba a Nokia en 2011 y, en ese mismo año, triplicaba sus ingresos llegando a los 33.800 millones de dólares. Tocó el cielo con los dedos para después precipitarse.

Muchos le acusan una falta de previsión del mercado y otros una competencia voraz. Sea como fuere, HTC vive sus peores momentos y bajo sus máximas de innovación, diseño y satisfacción del cliente, buscará resurgir.

Una buena oportunidad: El smartphone de gama media

¿Se puede ser innovador con un presupuesto medio? Intentar salir de una mala situación es el mejor trampolín para innovar y si HTC ya lo hizo bien una vez, ¿por qué no dos?

HTC ha desvelado otro año de pésimos resultados, con una caída del 80% en sus acciones. En este panorama la CEO de HTC, Cher Wang, reconoció a Reuters que «el problema fue que solamente nos concentramos en nuestro buque insignia«. Chang explicó que sus nuevos productos se venderán en un rango entre los 150 dólares y los 300 y se dirigirán a los mercados emergente. Esto no significa que se vayan a olvidar de sus gamas más altas por encima de los 600 dólares. Chang aseguró que «HTC no va entrar en el mercado de gama muy, muy baja«.

HTC tiene que actuar con rapidez si quiere convencer a los escépticos. Laura Cheng, analista de BNP Paribas en Taipei, explica que «solo el tiempo lo dirá, pero no soy optimista». Para Chen el problema fundamental de HTC consiste en sus productos decepcionantes y poco atractivos que «no ofrecen nada realmente nuevo al mercado».

Por su parte Wang también es realista y reconoce que en en 2013 su compañía «no lo hizo bien«. A pesar de las buenas críticas del HTC One, éstas no se reflejaron en las ventas. Desde la propia empresa reconocen que HTC necesita una campaña agresiva que sea capaz de llegar al mercado de los jóvenes entre 20 y 30 años.

Los ejecutivos apuntan que para compensar las bajas ventas de los teléfonos de gama alta, la empresa debe apoyarse en teléfonos más baratos, de esta forma «la rentabilidad crecerá» explicó Wang. También esperan que crezca la demanda de los smartphone de gama alta y dentro de poco presentarán el sucesor del HTC One.

Estos nuevos teléfonos vendrán a llenar el vacío existente en el portfolio de HTC. De los 53 teléfonos que venden en su web china, solo tres cuestan menos de 150 dólares y 21 superan los 500 dólares.

«Solía tener un HTC, pero los precios se han vuelto demasiado alto» explica Liang Lihuan de 30 años y residente en Bejing, una frase que se podría repetir en cualquier mercado donde juega la marca. China es uno de los lugares donde mejor acogida están teniendo estos teléfonos baratos y de donde salen la mayoría. Pero este mercado se vuelve cada vez más competitivo y aquí ha entrado hasta Apple. HTC se las tendrá que ver cara a cara con Xiaomi, con un rango de precios entre los 130 dólares y los 410. Además de Huawei que cuenta con 8 modelos por debajo de los 150 dólares, un precio al que llaman el umbral mágico.

África, el paraíso de los mercados emergentes

Dentro de los mercados emergentes, estas dos palabras que tanto llaman la atención a los especialistas en telecomunicaciones, se encuentra el continente africano. Muchos han visto como China ya ha explotado y se ha vuelto un mercado más maduro y mientras tanto África está trabajando en llevar la conexión a Internet a todo el continente gracias a los teléfonos móviles. 

Durante los años 2000 y 2010 la adopción de telefonía móvil creció enormemente, llegando a un crecimiento anual del 30%. Un crecimiento que se vio impulsado gracias a los teléfonos clásicos, más accesibles económicamente.

Ahora se espera que el mercado del smartphone se doble en los próximos cuatro años. Por eso los fabricantes que ya dominan están haciendo sus apuestas de valor. Así Nokia, que dirige el juego en el continente, está haciendo grandes apuestas para revalidar su título.

Por su parte, Huawei lleva desde 2011 en el mercado y venderá nuevos modelos de Android por debajo de los 100 dólares en países como Nigeria y Kenya. Samsung está testando, todavía no ha entrado pero está interesada en este mercado.

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