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Europa asume que habrá que regular a las grandes tecnológicas para proteger al consumidor
La situación sigue movida en Europa por las cuestiones que sigue planteando la falta de acuerdo de cara a afrontar el Brexit de Reino Unido, pero las grandes tecnológicas también se mantienen como uno de los puntos más importantes en el futuro a medio y largo plazo de la unión.
A nivel internacional hemos visto que algunos políticos, como la senadora Warren, son conscientes de la necesidad no ya de regular a las grandes empresas tecnológicas, sino de dividirlas en partes más pequeñas, una idea que también ha llegado a Europa aunque todavía no ha terminado de calar a gran nivel, ya que el sentir general parece abogar más hacia una regulación profunda.
Frans Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europea, ha comentado recientemente que es solo cuestión de tiempo hasta que sea imprescindible regular a las grandes tecnológicas, y también a las principales redes sociales, todo con el objetivo de proteger a los ciudadanos.
La idea que plantea Frans Timmermans tiene sentido, sobre todo cuando vemos las sanciones que han recibido empresas del calibre de Facebook y Google por cuestiones que afectan directamente a los consumidores, como por ejemplo la privacidad o la competencia desleal.
No hay duda de que es una meta complicada y que será necesaria la colaboración de las empresas afectadas para evitar consecuencias indeseables, pero el vicepresidente de la Comisión Europea lo tiene claro:
«Si vemos que los gigantes tecnológicos son una amenaza para nuestros ciudadanos los regularemos. Si no cooperan con nosotros puede que lo hagamos mal».
Una explicación muy interesante, ya que como vemos Frans Timmermans hace un llamamiento de forma tácita a la colaboración de los gigantes tecnológicos, avisando de que la falta de la misma podría derivar en una regulación inadecuada. Las empresas serían, en primera instancia, las grandes perjudicadas, pero las consecuencias podría acabar salpicando a los usuarios, así que lo ideal sería, efectivamente, buscar un acercamiento entre ambas partes.
La necesidad de establecer una regulación profunda en Europa, y en el mundo, de las grandes tecnológicas, se hace cada vez más patente debido no solo a las clásicas cuestiones de privacidad y de competencia, sino también a hechos como la retransmisión en vivo que se hizo a través de las redes sociales (Facebook) del tiroteo de Nueva Zelanda.
Aunque Frans Timmermans habla en nombre de la Unión Europea lo cierto es que está convencido de que las presiones para regular a las grandes tecnológicas serán una realidad a nivel internacional, y no le falta razón.
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