Delitos de guante blanco en el sector IT

Hoy informaban en Reuters que la empresa de tecnología biométrica, Fingerprint Cards, ha reconocido que su presidente ejecutivo y un accionista de la empresa están siendo investigados por un delito de información privilegiada, y que habían reemplazado a su CEO como nuevo aviso. La compañía ha suspendido sus cotización en la Bolsa de Estocolmo y ha destituido a su CEO, Johan Carlstrom por Jorgen Lantton.

«Lamentamos profundamente la situación que se ha creado a raíz de esto, y naturalmente, creemos que son muy graves las acusaciones dirigidas al presidente de la compañía y el ex miembro de la junta», dijo Fingerprint Cards en un comunicado.

Las destituciones de altos ejecutivos cuyo comportamiento «irregular» daña la imagen de la compañía han sido una constante en los últimos tiempos y se han llevado a cabo de forma pública y fulminante. Mientras que en otros sectores como la política o la banca parece que por mucho mal que hagan los directivos están bien asentados en sus puestos, en el sector TIC no se perdona la más mínima informalidad.

Los motivos son muy variopintos: desde los «tìpicos» y extendido delitos de información privilegiada con la que (suponemos) los directivos van a lucrarse, hasta motivos personales o irregularidades en la gestión de la empresa.

El último y más sonado dentro de nuestras fronteras ha sido el del CEO de Gowex, Jenaro Castro, que vio cómo su imperio se derrumbaba este verano a raíz de la publicación de un informe por la firma Gotham en el que destapaba las irregularidades y mentiras sobre las que la compañía española se ha sostenido durante años.

Otro caso muy llamativo fue el del CEO de Mozilla, que duró 10 días en el cargo y fue obligado a dimitir por “el bien de la empresa“, ya que cada vez salían más detractores que criticaban la donación que hizo en el año 2008 a Proposición 8, una iniciativa en California que criticaba el matrimonio entre personas del mismo sexo en California.

Más o menos por la misma fecha, el consejo de la plataforma publicitaria RadiumOne despedía a su CEO, Gurbaksh Chahal por haber sido condenado por agresión y violencia doméstica. Este asunto ha generado bastante polémica interna y ha sido una decisión muy reflexionada por el resto de directivos de la empresa ya que Chahal es presidente de la junta, fundador y pieza clave en la compañía. No obstante, Chahal podría negarse a irse ya que tiene suficientes acciones de RadiumOne para ofrecer resistencia.