Murdoch a Google: para de robar

Rupert Murdoch, uno de los hombres más ricos del mundo y propietario del mayor conglomerado de medios de comunicación mundial acusa al gigante de la red y al resto de motores de búsqueda de “robarle contenido y hacer negocio con ello”. Además, confirma en sociedad con Associated Press -la mayor agencia de noticias mundial- que cobrará también a los internautas por el acceso a los contenidos digitales a finales de 2009. 

Murdoch, multimillonario australiano, controla una gran cantidad de medios de comunicación destacando News Corp, The New York Times o The Washington Post. Como la mayoría de compañías de medios clásicos en formato “físico” ha llegado tarde a la era digital y ahora pretende ponerse al día y que mejor forma que atacar al líder de Internet, Google, ciertamente negocia con sus noticias en su buscador, pero también le envía una buena parte de sus clientes a sus medios digitales. ¿Si no hay acuerdo se arriesgarán a quedar fuera de las búsquedas de los gigantes de Internet?

Sea como fuere, el proceso de cobro por contenidos on-line es imparable con el anuncio oficial desde Pekín de los responsables de News Corp y Associated Press, de que es hora que los propietarios de los motores de búsqueda de Internet no utilicen contenido gratuitamente. «Nosotros, los creadores de contenido hemos sido demasiado lentos en reaccionar a la libre explotación de las noticias por terceros sin el permiso correspondiente” indicó Tom Curley, presidente ejecutivo de la AP, en una reunión de 300 dirigentes de medios de comunicación mundial en Pekín.

“Servicios web como Wikipedia, YouTube o Facebook se han convertido en los destinos preferidos de los clientes desplazando los portales de noticias tradicionales». “Los creadores de contenido debemos actuar con rapidez y decisión para retomar el control de nuestro contenido», indicó Curley.

Por su parte, Murdoch, recalcó que «los agregadores y plagiarios pronto tendrán que pagar un precio por la captación de nuestros contenidos”, estimando que el uso no autorizado de su material les cuesta decenas de millones de dólares en ingresos provenientes de publicidad, en un momento en que menos se lo pueden permitir.

Además, no sólo los grandes medios tendrán que pagar, sino que también lo tendrá que hacer el usuario de a pie, bajo una fórmula que se estudia para su implantación a finales de año. ¿Será efectiva? ¿Está dispuesto el internauta a pagar por contenidos?