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Opinión

Hacia una estrategia multi-cloud: aprovechando lo mejor de cada casa

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El cloud ha transformado la manera de hacer negocios en los últimos años. De la cloud privada pasamos a la pública y a nubes híbridas. Ahora la pregunta que se nos plantea es si es necesario cerrarse a un solo proveedor, Amazon, Google o Microsoft, o si es mejor elegir las soluciones que más nos convengan de cada fabricante para desarrollar los proyectos de la manera más ajustada a nuestras necesidades.

Forbes estima que el mercado global para cloud híbrida crecerá un 120% de aquí a 2023 hasta alcanzar casi los 100.000 millones de dólares. Según Mesosphere, una de cada cuatro empresas trabaja con más de un proveedor de servicios cloud. De acuerdo con Flexera, el 84% de las organizaciones de más de mil empleados cuenta con una estrategia multi-cloud.

Según estos datos introductorios, parece evidente que durante los próximos años será clave reformular la estrategia multi-cloud que permita a las empresas de cualquier tamaño obtener el máximo beneficio de servicios que ofrecen los proveedores cloud y así impactar positivamente al desarrollo de su negocio.

Desde su irrupción hace unos años, el cloud ha transformado los negocios y ha demostrado que es el mejor entorno para desarrollar productos digitales. La evolución de esta tecnología nos ha hecho pasar por tener cada empresa sus propios servidores en un inicio, llegando luego a los centros de datos en los que las organizaciones depositaban sus activos –sin perder el control de la gestión- con el objetivo de protegerse de cortes de luz o refrigeración y hasta la apuesta por la virtualización y las herramientas de automatización.

Cloud es mucho más que una nueva forma de gestionar servidores, como ha demostrado esta evolución: es un nuevo paradigma que ha cambiado nuestra forma de entender el desarrollo de software. IaaS, PaaS y Serverless permiten simplificar las tareas relacionadas con el manejo de la infraestructura y las tecnologías de base que no aportan valor real, para que los CIOs puedan centrar sus esfuerzos en el desarrollo de aplicaciones y aportar valor al negocio, ganando en la agilidad necesaria para competir en un momento en el que los clientes van más rápido que las empresas.

Pero la pregunta ahora es: en un mundo dominado por los tres grandes proveedores, Amazon Web Services, Google Cloud y Microsoft Azure, ¿por qué hay que elegir un único proveedor cuando podemos elegir las soluciones de cada uno que más nos convengan para el desarrollo de nuestro proyecto? Cada uno de estos fabricantes invierte miles de millones de dólares en I+D que nos ahorran los procesos de “inventar la rueda” de forma recurrente por lo que, llegados a este punto en el que nos ha quedado claro que la apuesta por un entorno multi-cloud es fundamental, es interesante ver cómo nos pueden resolver de forma práctica los grandes fabricantes de cloud los retos a los que se enfrenta cada organización en su día a día.

Computación: un servicio básico en la nube es la capacidad de cálculo. Los tres proveedores ofrecen distintos tipos de instancias, tanto basadas en Windows como en Linux, con GPUs o con configuraciones de gran tamaño y alto rendimiento. Todos tienen ya su servicio gestionado de Kubernetes y Serverless. Algunos de los servicios de computación más destacados que se han incorporado recientemente son AWS Outposts, que permite utilizar on-prem la tecnología de la nube de Amazon y GKE On-Prem, con el que se puede desarrollar en Kubernetes Engine en el datacenter propio.

Almacenamiento: otra funcionalidad imprescindible en cloud es la capacidad de almacenamiento. AWS, como pionero, es el más reconocido, pero todos ofrecen un amplio abanico de servicios muy fiables que cubre todos los tipos de almacenamiento: basado en objetos, de ficheros, discos para instancias, backup… Los tres proveedores presentan servicios para transferir grandes volúmenes de datos a la nube en los que envían dispositivos a la sede del cliente para copiar los datos y luego llevarlos a su centro de datos para transferirlos con mayor rapidez y seguridad. El más grande y espectacular de todos es Snowmobile, en el que un camión de Amazon de casi 20 metros de largo se desplaza a las instalaciones del cliente a recoger los datos.

Bases de datos: como resulta lógico, el catálogo de bases de datos disponibles en la nube es amplísimo: bases de datos relacionales, NoSQL, cachés, datawarehouses, etc. Los motores de bases de datos relacionales soportados por Google son únicamente MySQL y PostgreSQL, mientras que Azure ofrece también MariaDB y SqlServer. Amazon añade Oracle a todas éstas.

Redes y conectividad: Se trata de una de las categorías donde más equiparación existe. Hay diferencias importantes en las tecnologías que utiliza cada proveedor o en cómo resuelven cada necesidad, pero con todos se pueden gestionar las redes de en la nube, crear subredes, disponer de balanceadores de carga, hacer NAT, configurar un firewall, crear una VPN, establecer conexiones dedicadas con un datacenter corporativo o montar un CDN.

Herramientas para la gestión y control de la cloud: en este apartado incluyen las utilidades que facilitan la monitorización, la facturación, la trazabilidad, la gestión de la infraestructura como código o la aplicación de buenas prácticas. Son funcionalidades que dotan de mayor cohesión al resto de servicios y confieren a cada cloud el carácter de plataforma.

Seguridad: los tres proveedores ofrecen una serie de servicios extra para configurar la seguridad de las aplicaciones y datos de acuerdo a las necesidades propias de cada cliente. La gestión de identidades se realiza a través de IAM y, aunque de forma nativa los de Google y Azure están muy orientados a Gsuite y Active Directory respectivamente, todos ofrecen soluciones de integración multiplataforma. Con la reciente incorporación de Cloud Armor por parte de Google, todos cuentan con servicio para protección frente a ataques DDOS.

Herramientas para desarrolladores: hoy en día los proveedores disponen de todas las herramientas necesarias para construir, desplegar, diagnosticar, debuggear y gestionar en modo multiplataforma servicios y aplicaciones escalables. Esta oferta tan amplia y variada parece encaminada a facilitar que la nube se conviertan en el entorno de desarrollo del CIO.

Big Data & Analytics: en este apartado cobra especial relevancia una de las características principales de la nube: el uso bajo demanda. En cualquiera de las tres plataformas existen servicios gestionados, así como herramientas para streaming de datos, orquestación o visualización, entre otros.

Machine Learning & AI: en esta categoría, que es probablemente la que más servicios ha incorporado en los últimos años, destacan por su madurez las APIs de Google Cloud.

IoT, Blockchain y otros: los tres proveedores cuentan con su propia plataforma de IoT y además, ofrecen servicios para juegos, VR o AR. Los servicios de Blockchain lanzados por AWS son especialmente interesantes porque aíslan al cliente de las dificultades de montar tu propia red. De la misma manera, podemos buscar herramientas concretas para consumir productos y servicios de terceros.

El cloud en España

Durante el pasado año se ha percibido un mayor grado de madurez en la adopción de soluciones cloud por parte de las compañías españolas: tendencias como los desarrollos nativos en la nube y la apuesta por estrategias multi-cloud o de cloud híbrida continuarán su consolidación durante el año que viene, sobre todo porque la elección entre los diferentes proveedores cloud es una decisión de negocio importante y seleccionar una única solución, en general, suele servir solamente para startups, pero no suele ser suficiente para empresas experimentadas.

Mediante un enfoque multi-cloud se puede aprovechar el amplio catálogo de servicios que ofrecen los diferentes proveedores y así se observa en las estrategias de adopción entre las empresas de nuestro país.

Del mismo modo, las empresas que desarrollan una estrategia híbrida obtienen importantes ventajas: crear una cloud privada modernizando el ecosistema tecnológico y combinarla con una o varias clouds públicas nos permitirá conjugar lo mejor de ambos mundos, ganando toda la flexibilidad de la nube mientras se cumple con marcos regulatorios muy estrictos, manteniendo los datos en local y continuando la amortización de la inversión en infraestructura.

Firmado: Miguel Garrido y Juan María Fiz, responsables de la iniciativa cloud en Paradigma Digital

 


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