Conecta con nosotros
Antonio Areses - HPE GreenLake Antonio Areses - HPE GreenLake

Entrevistas

“Con HPE GreenLake nosotros asumimos el riesgo tecnológico y los clientes se centran en su negocio”

Antonio Areses

Category Manager de HPE GreenLake

HPE España

Publicado el

Tras unos años en los que muchas cargas de trabajo se han desplazado a la nube pública, actualmente estamos asistiendo a una reversión de este modelo. Muchas empresas están procediendo a traer de vuelta procesos que tienen funcionando en nubes públicas a sus propios Data Centers para mejorar sus costes o proteger mejor sus datos.

Esto plantea retos importantes ya que sus infraestructuras on-premises seguramente no dispongan de la capacidad necesaria para acoger esas cargas, o que les permitan crecer al ritmo necesario. Otro aspecto complicado es la propia complejidad técnica que requiere todo el proceso. HPE GreenLake es un modelo de servicio que ha incorporado HPE a su oferta para dar respuesta a estos desafíos con las mayores garantías de calidad y seguridad.

Hemos tenido la oportunidad de charlar con Antonio Areses, Category Manager de HPE GreenLake en España, para conocer en detalle qué es HPE GreenLake y cuáles son sus ventajas y casos de uso más indicados.

MCPRO: ¿Qué es HPE GreenLake Flex Capacity?

Antonio Areses: HPE GreenLake es la respuesta a una serie de requerimientos por parte del mercado ante la disrupción de la filosofía Cloud, lo que podríamos llamar Public Cloud, que ofrece una serie de beneficios a los clientes frente a las infraestructuras on-premises. Hablamos de aspectos como no tener que invertir inicialmente en la solución y no correr el riesgo de dimensionarse erróneamente, ya sea por exceso o por defecto, para poder cumplir los requerimientos del negocio, que cada vez son más variables y puntuales.

Eso en el mundo de las nubes públicas ofrece una flexibilidad que la alternativa on-premises no tiene. Estos requerimientos ponen en riesgo, por decirlo así, la parte de la infraestructura on-premises, y genera una demanda al departamento de servicios de una respuesta tecnológica. Esto es HPE GreenLake Flex Capacity.

HPE GreenLake está pensado para satisfacer todas las expectativas y beneficios esperados que nuestros clientes esperan de la nube pública (o en la privada cercana) pero intentando mantener las ventajas de tener un on-premises: el control de la infraestructura, el control de la velocidad, el control de la seguridad,… Es decir, no perder ese control sobre la tecnología, sin tener que cumplir los requerimientos de la infraestructura on-premises anterior, esto es, una adquisición, una apuesta de dinero, un riesgo sobre la selección de la tecnología y la capacidad, etc. Esto es todo lo que se delega en HPE en este modelo.

HPE GreenLake es modular, puede incorporar o no la gestión. La idea es pasarle el riesgo y la parte de gestión interna de una organización a HPE GreenLake, pero todo ello dentro del control de seguridad del Data Center de la compañía y evitar los posibles riesgos de la nube pública.

Antonio Areses - HPE GreenLake

MCPRO: ¿Podemos decir que HPE GreenLake es una evolución de todo lo que teníais anteriormente con HPE Flex Capacity?

Antonio Areses: HPE GreenLake es, por decirlo así, una evolución de Flex Capacity. Para explicarlo con claridad, Flex Capacity es el framework que me permite partir de cualquier elemento de HW, SW o servicios y transformarlo en el modelo As-A-Service. Incluso puede haber un módulo más que englobe la gestión. Sobre la base del antiguo Flex Capacity se ha llevado este enfoque también a soluciones más verticales, con elementos más específicos como un «Backup as a Service», montando una solución que se encargue de las copias de seguridad y poder olvidarse del resto del entorno.

También se ofrece una solución de base de datos «as a Service», para pagar sólo por la unidad de base de datos, SAP Hana, Enterprise DB o Azure Stack. El concepto de HPE GreenLake es dar un servicio vertical, pero más cercano al Cloud, que no sólo sea IAS. Es complementario. Los clientes existentes han sido los primeros en adoptarlo, ahora como HPE GreenLake Flex Capacity.

«HPE GreenLake ofrece todas las ventajas de la nube pública con el control de las infraestructuras on-premises»

Con HPE GreenLake queremos transmitir a nuestros clientes la tranquilidad que les puede aportar el pasar ese elemento de su tecnología a HPE para que lo gestionemos nosotros. Les ofrecemos que no se preocupen de esa parte, que se puedan centrar en todo lo demás, en todo lo relativo a la optimización y crecimiento de sus negocios.

Esa cercanía de la parte de infraestructura permite hacer el catálogo de lo que quieras contratar con HPE de una forma más personalizada. Cuando vas a una nube pública el catálogo, lógicamente, es un catálogo cerrado, con muchas opciones que los clientes tienen que coger y acomodar a su tecnología. En este caso, al estar dedicado a un cliente en particular, el catálogo que le mostramos es algo personalizable.

MCPRO: En el caso de un cliente con el que empezáis a trabajar, ¿cómo empieza el proceso? Entiendo que se instalan unas máquinas nuevas en el Data Center del cliente que coexisten con la tecnología que tuviera ya. La capacidad de los nuevos equipos puede ser tanta como se quiera pero, ¿cómo pasan a estar integrados los equipos existentes del cliente? ¿Cómo los gestiona HPE?

Antonio Areses: El objetivo es estudiar la necesidad clara del cliente para ver qué es lo que tiene sentido ofrecerle dentro de su propia infraestructura. Cuando hablamos de Backup-as-a-Service, hay que evaluar qué solución tecnológica es la más adecuada. Hemos incorporado tecnologías de partners de HPE al modelo HPE GreenLake para poder ofrecerle al cliente final una solución que se integra en su stack tecnológico. Eso requiere conocer la tecnología del cliente en primer lugar y ver qué políticas de backup se están usando.

Se instalan los elementos necesarios dentro de la infraestructura que ya tiene el cliente, para soportar el servicio de backup. La copia de seguridad debe hacerse dentro de la infraestructura existente y debe almacenar tanto las nuevas máquinas como las anteriores. Puede venir acompañado de una parte de modelo de gestión, que debe integrarse en el modelo de gestión que ya tiene el cliente. Aquí se definen qué tareas del out-tasking delega el cliente en HPE y cómo se integra con las herramientas del cliente y también con su modelo de gestión.

Antonio Areses - HPE GreenLake

Consiste en absorber una parte de esa tecnología, del modelo de gestión del cliente para que no sea él quien tenga que estar preparado de forma continua. Al analizar patrones de uso hemos visto que los clientes le dedican tiempo al ciclo de compra, a la decisión, al soporte que implica, etc. Y pueden irse al cloud que se lo proporciona todo. El único problema del cloud es que no se tiene el mismo control sobre la seguridad, las limitaciones o costes del ancho de banda, el control fino de los presupuestos, ya que se puede consumir sin limitaciones y luego, al final, pagas por lo usado.

Hay grandes consultoras que señalan que «el CIO del futuro tiene que ser una persona eficaz y eficiente». Eficaz, porque tiene que tener las soluciones tecnológicas que requiere el negocio. Esto, claramente, nos lleva fácilmente a un sobredimensionamiento. Pero, a la vez, eficiente: no gastar dinero en recursos que no esté utilizando.

Si esto lo enlazamos con la dependencia de las tecnologías de cualquier negocio actual y de la evolución y cambios de la tecnología de un día para otro, dibuja un panorama complejo. El modelo HPE GreenLake es un modelo de servicios que facilita poner las nuevas tecnologías en uso y que, por su propia naturaleza, lleva a un ciclo de venta más largo de lo habitual porque hay que conocer muy bien lo que necesita y lo que ya tiene.

El proceso es éste: vemos cuál es la mejor solución, la ponemos en marcha y la integramos en tu organización, me encargo de la gestión y te cobro por una unidad común, como podría ser el «Terabyte» frontal que tienes en tu tecnología. A partir de este punto, el backup reside en el nivel de servicio HPE, y es HPE quien tiene que provisionarse para disponer del nivel tecnológico. El contrato se cierra por un período de 3 a 5 años, lo que le asegura también al cliente una referencia de precio previsible y estable de cara a sus presupuestos.

MCPRO: Una de las mayores ventajas de la nube es su escalabilidad. Esto es inmediato en la nube pública pero, ¿cómo se implementa en HPE GreenLake? Porque aquí no hay un pool casi infinito de recursos conectados, aquí se dispone sólo de las máquinas locales, ¿cómo dais respuesta a la necesidad de más capacidad?

Antonio Areses: Se hace un estudio previo del cliente para conocer sus necesidades reales y sus posibilidades de crecimiento. Eso se incorpora al contrato. A partir de aquí se optimiza la parte del uso complementando la infraestructura de modo que sea la que necesita el cliente. Esto lo hacemos de dos formas, una la que está en el contrato. No hace falta establecer una nueva contratación para ampliar su capacidad. Está dentro del servicio.

La diferencia está en que, en el modelo cloud, se solicitaría. Aquí la capacidad está en un elemento al que llamamos Buffer. La infraestructura disponible es la que hemos visto con el cliente que es la adecuada. Lo que hay es capacidad adicional en Buffer, aportamos una sobrecapacidad para poder responder ante cargas de trabajo mayores de manera inmediata, puesto que esa sobrecapacidad ya está ahí disponible.

«HPE instala desde el principio capacidad adicional en el cliente para hacer frente al crecimiento de la demanda»

Puede suceder que esta necesidad de una mayor capacidad tenga que ver con el crecimiento, en cuyo caso se incorporaría al rendimiento base, o que sea algo puntual. El cliente siempre tiene más capacidad disponible antes de que la necesite. Lo que hacemos es determinar esos mecanismos de crecimiento como la parte relativa al Buffer.

Para entenderlo, podemos pensar que el modelo está organizado por tramos. Imaginemos una empresa que, en el caso de mayor crecimiento, necesite 2 Pettabytes pero que, por el momento, sólo está usando 100 Terabytes. Mientras no necesite crecer, el sistema le dará los 100 Tb pero HPE se compromete, por contrato, a ofrecer los 2 Pb si son necesarios. Para ello se valora este Buffer y se dialoga constantemente con el cliente.

Si se produce un cambio de planificación o de estructura de negocio que requiere una mayor capacidad, que supere lo que puede alcanzar el Buffer, se crecería dentro del contrato. El contrato establece unos límites y unos tramos de forma inicial que definen claramente los costes que tendrá. HPE monitoriza la parte de capacidad y, si vemos que se alcanzan los límites, se lo comentamos al cliente. Cuando vemos que no es un pico puntual, sino que han aumentado sus necesidades, lo lógico es ir creciendo.

La gran ventaja es que partimos de un contrato firmado donde está todo definido y no hace falta hacer ninguna adquisición de nuevo. Le notificamos al cliente cómo cambiará la facturación ya que crece el consumo y las unidades. El precio unitario seguirá siendo el que ha tenido siempre el cliente, lo único que cambia es que, al consumir más, subirá la facturación.

Como están definidos una serie de tramos, ese precio unitario va mejorando a medida que sube el volumen. Nos ha pasado en algún cliente que, al ver estos tramos, su departamento de compras ha preferido consumir más infraestructura para dar el salto a un precio unitario mejor.

MCPRO: Entiendo que para los clientes este planteamiento también tiene una ventaja adicional, que es ir de la mano de un partner como HPE. Donde antes se enfrentaban a desafíos tecnológicos complejos en solitario, ahora cuentan con la experiencia de HPE.

Antonio Areses: Gracias a HPE GreenLake Flex Capacity, nos podemos encargar de toda la complejidad del servicio para ofrecer las prestaciones que requiere el cliente ya que nos alineamos completamente con sus necesidades. Todo esto permite que nuestros clientes puedan acceder a la sofisticación tecnológica que necesiten.

Hemos invertido en comprar una herramienta llamada Cloud Cruiser, que sirve para medir el uso tanto en la nube como en la infraestructura local. Gracias a esta herramienta medimos la capacidad en uso y le asociamos una facturación.

Las áreas de IAS y de infraestructura son las que luego delimitarán el nivel de servicio. Si un cliente tiene una infraestructura de almacenamiento con distintos niveles de servicio porque hay distintos discos para dar distintos niveles de atención o de política de redundancia.

«Con HPE GreenLake Flex Capacity nos podemos encargar de toda la complejidad del servicio de un cliente»

Tenemos clientes con cabinas redundantes que tienen discos que podríamos llamar de nivel oro, plata o bronce con distintos niveles de seguridad de réplica como de velocidad de acceso. Depende de la arquitectura concreta de cada caso, que lleva asociado un nivel de servicio. En todos los casos, el servicio que proporciona HPE es completo: las versiones están actualizadas, tener perfectamente activo todo siempre. Ese es el nivel de servicio al que nos comprometemos por el acuerdo con el cliente.

La diferencia es que, si tengo discos replicados, uno de los aspectos que se incluyen en el contrato es que monitorizaremos esa réplica para garantizar su disponibilidad en caso necesario. Y levantar una alerta cuando detectemos que algo no va bien. Hemos tenido el caso con un cliente en el que la línea de comunicación es parte de lo que gestiona directamente él. Si hay algún problema con la línea de comunicaciones de réplica, abrimos una incidencia en su parte del soporte para solventarlo lo antes posible.

Antonio Areses - HPE GreenLake

MCPRO: Esto nos lleva a la siguiente pregunta, ¿es posible que, al ir de vuestra mano, un cliente acceda a tecnologías a las que no hubiera podido acceder por su cuenta?

Antonio Areses: Bueno, tenemos casos reales de clientes que, cuando empezó la revolución del Big Data, dedicaron grandes recursos a disponer de infraestructura. Hablamos de invertir 2M o 4M de euros en licencias de software para afrontar proyectos de Big Data. Y hablamos de acometer ese coste desde el principio, algo que va contra las mejores prácticas de los equipos de IT que no quieren ver comprometida una parte importante de su presupuesto sin saber si se va a usar por completo.

Al llevar proyectos así a nuestro modelo de servicio, cerramos un contrato que defina un posible nivel de uso de esos cuatro millones, pero vamos empezando con una inversión de 100K. Así podemos asegurar el trabajo poco a poco. Además, si sus equipos no están preparados para poner en marcha esta tecnología, lo hacemos nosotros. Asociamos los masters y los workers de un Enterprise Hadoop gestionado de modo que pueda ir creciendo a medida que es necesario.

MCPRO: Visto todo lo anterior, el modelo HPE GreenLake parece llevar a una importante reducción del Capex, ¿no es así?

Antonio Areses: Depende mucho de la forma en la que realiza la auditoría cada empresa, pero en el modelo de contrato, la responsabilidad del hardware recae en HPE, que es quien compra los equipos. Eso puede favorecer la eliminación de elementos auditables que tenga un cliente. Esta flexibilidad puede ser de gran ayuda en clientes a los que les encaje este planteamiento.

Tenemos acuerdos con consultoras que dan a conocer el beneficio directo que tiene para posibles clientes, ya que no requiere una inversión inicial, les permite empezar a trabajar con presupuestos limitados pero sin complicar futuros crecimientos.

El ahorro en Capex/Opex se produce en dos áreas. Una, se entrega en modo servicio y otra, se ajusta a las necesidades que tienes. Esto hace que sea HPE quien asume ese riesgo relacionado con la capacidad. Y te permite un ahorro importante al no tener que sobredimensionar la infraestructura desde un principio con el coste que conlleva. Nadie compra una infraestructura ajustada a lo que requiere precisamente al comienzo. Lo que hace HPE es determinar unos límites máximo y mínimo de operación.

Antonio Areses - HPE GreenLake

MCPRO: ¿Qué dimensión de compañía es la habitual entre vuestra base de clientes? ¿Puedes darnos un nivel de facturación, un número de empleados o la cantidad de recursos de TI de vuestro cliente promedio?

Antonio Areses: Primero me gustaría comentar que hemos iniciado un modelo de comercialización a través del canal con HPE GreenLake de modo que lleguemos a clientes de menor dimensión de lo que es habitual en el negocio directo. Hablamos de unos 30 terabytes de almacenamiento y unos 5 o 6 servidores como punto de partida. Desde ahí empieza a tener sentido este ejercicio.

Desde un principio buscamos grandes clientes donde pensábamos que tenía mejor aplicación este planteamiento, pero hemos visto que en las empresas SMB tiene una gran aplicación. No es tan importante la dimensión como la duración mínima de ese compromiso.

HPE llega directamente a los grandes clientes y algunas SMB que ya son clientes. Complementariamente es el canal quien nos facilita llegar a la gran masa de SMBs. Ahora, por ejemplo, estamos trabajando con ayuntamientos, o empresas de impresión. Estos últimos no tienen muchos empleados, pero sí son grandes consumidores de tecnología. Una de las ventajas que han visto más claras en estos casos tiene que ver con clientes que han ido a la nube y luego han vuelto. Con nosotros ese cambio es muy fácil, ya que le montamos la infraestructura necesaria en sus instalaciones en modo servicio.

Llegado el final del período estipulado en el contrato, o porque una empresa se divida en varias partes, se puede revertir ese contrato. Se puede ejecutar, si así se quiere, con un valor residual y revierte el modelo al planteamiento tradicional. Es más un tema financiero que técnico, ya que todos los sistemas están completamente integrados con el resto de la tecnología del cliente.

MCPRO: Hemos hablado de grandes empresas y de SMBs, pero, ¿no es éste un modelo muy interesante para multinacionales que estén repartidas por todo el mundo? Hay países en los que puede ser difícil acceder a la tecnología y a los equipos de TI con el nivel de seguridad requerido, que respondan a unas directrices homologadas de operación y que permitan un control centralizado.

Antonio Areses: Tenemos acuerdos públicos con Telefónica con Hadoop as a Service con un planteamiento global. Somos una empresa global que cuenta con componentes locales para dar el servicio necesario. Y todo ello con una gestión global unificada. El catálogo de servicio está unificado, otra cosa son los precios e impuestos locales que le correspondan en cada país. Una gran entidad financiera española también ha pedido un acuerdo así para varios países. Se gestiona globalmente desde aquí, pero luego hay una parte de ejecución local en países como México o Brasil. Es una visión completamente global.

«Los clientes que han probado HPE GreenLake se plantean sus nuevos proyectos con este modelo»

Lo que sí podemos destacar es que, casi todos los clientes que han trabajado con HPE GreenLake empiezan a hablar de los siguientes contratos y ampliaciones de la tecnología de consumo también con este nuevo modelo. Obviamente, los interlocutores para HPE GreenLake son personas de TI y para la parte de consumo los interlocutores pertenecen a los departamentos de negocio o, si las empresas son de pequeña dimensión, hasta con el equipo de dirección de la compañía.

El principal atractivo para estas empresas es trabajar con modelos donde pueden alinear su negocio con los costes de la parte de consumo. No voy a decir que el primer contrato con estos clientes haya sido fácil, pero el segundo ha sido mucho más rápido y directamente en modo GreenLake. Muchos de ellos solicitan un servicio global.

Antonio Areses - HPE GreenLake

MCPRO: Forrester menciona en el informe «The Total Economic Impact Of HPE GreenLake Flex Capacity» una mayor productividad de los equipos de TI al dejar de ocuparse de determinadas tareas. ¿Es complicado este primer momento cuando los profesionales de TI pueden sentir que pierden parte del control de sus infraestructuras?

Antonio Areses: Bueno, los equipos de TI ven rápidamente que dejan de dedicar tiempo a la petición de la infraestructura, al soporte, a mantenerlo activo y pueden dedicarse a conocer mejor qué requiere su propio cliente interno y cómo elegir las mejores opciones para darles servicio. Esto les permite incorporar cualquier tecnología directamente a su negocio. Ya no van a ser un ‘stopper’ porque no son capaces de entregarlo en tiempo. La filosofía de estas demandas cambia y, ahora, los equipos de TI pueden responder a las necesidades de negocio de sus empresas de forma óptima.

Te voy a hablar de un ejemplo real. Para un cliente preparamos un catálogo de máquinas virtuales para que, internamente, los responsables de TI se lo puedan mostrar a sus unidades de negocio y sepan, desde el principio, las posibilidades y costes que tiene cada opción. Es una forma dinámica de trabajar, en la que TI dispone de un catálogo que ha cerrado con nosotros, con HPE, para poder ofrecer un nivel de servicio fácilmente según avancen sus necesidades de negocio.

Y esto no se limita a las tecnologías más establecidas. Gracias a nuestro expertise, los clientes pueden poner en marcha proyectos con tecnologías que no conocen como Hadoop o una nueva base de datos en un tiempo mucho más corto que si tuvieran que familiarizarse con ellas hasta poder desplegarlas. HPE lo proporciona en la modalidad «As-a-Service».

MCPRO: De este modo, lo que inicialmente pudiera parecer una pérdida de control por parte de los equipos de TI, puede llegar a ser todo lo contrario, porque aumentan sus capacidades y la disponibilidad del servicio ¿no es así?

Antonio Areses: Efectivamente. Siguen teniendo una infraestructura on-premises y la tecnología que se incorpora en todos los proyectos la presenta HPE pero trabajando mano a mano con el equipo de TI del cliente, por lo que la conocen y la manejan perfectamente. Hace poco nos encontramos con algunos clientes que nos comentaban que, al hacer outsourcing de determinados proyectos, era el proveedor quien elegía la tecnología, que puede no ser la que hubiera elegido ese cliente.

«Los equipos de TI dejan de dedicar tiempo al soporte y mantenimiento y se centran en conocer mejor lo que necesita su cliente interno y en cómo elegir las mejores opciones para darle servicio»

Pensemos, por ejemplo, en decisiones tecnológicas de ese proveedor que pueden provocar un problema en el futuro con cambios tecnológicos estratégicos para el cliente. Aquí la diferencia está en el catálogo disponible para la infraestructura o la parte de IAS muy segmentado que está acorde con lo que quiere el cliente.

MCPRO: Has hablado en varias ocasiones de los contratos que definen el marco de la relación con el cliente. En ellos se especifica la dimensión que tendrá todo, el buffer, etc. ¿Esos contratos incorporan también elementos de actualización, de evolución, cómo y cuándo se renuevan las máquinas,…? ¿Cómo se articula el detalle fino de la actualización de la infraestructura?

Antonio Areses: Los equipos que se instalan al comenzar un nuevo contrato siempre son de la última tecnología. La última versión con pleno soporte y actualización de firmware y software. Hay una opción en el contrato centrada específicamente en esto: en la renovación tecnológica. Esto permite plantear dentro de la duración del contrato un cambio de tecnología, generalmente asociado a un crecimiento en volumetría y en extensión de tiempo. En resumen, que puede especificarse la renovación tecnológica dentro del marco de la relación.

Lo primero es que HPE mantiene la tecnología incluida en el contrato siempre soportada y activa. En el caso de que esa solución tecnológica tenga algún problema, HPE es la encargada de proporcionar el servicio, obviamente siempre en estrecha comunicación con el cliente y con su aprobación.

Al cabo de un contrato de, por ejemplo, 5 años, si se acuerda la renovación y, además, ha crecido la volumetría, entonces podemos acordar una renovación tecnológica. Lo que no hacemos es proceder a una renovación tecnológica sin el acuerdo con la parte del cliente. Es decir, HPE GreenLake permite seguir manteniendo el control de la gestión de cambios.

Antonio Areses - HPE GreenLake

MCPRO: La seguridad es un elemento fundamental en TI, pero quizá más en una vuelta del cloud a un modelo on-premises. Por lo que hemos visto hasta ahora, cuando un cliente adopta HPE GreenLake, vosotros entráis en una estructura tecnológica y un planteamiento de seguridad que ya está definido, y en el que no habéis podido participar desde un principio. ¿Cómo gestionáis este apartado?

Antonio Areses: Si planteamos una parte de IAS dentro de una infraestructura de un cliente, se plantea la infraestructura dentro de las políticas de seguridad que tiene el cliente. Efectivamente, ahí hay dos acercamientos. Uno, estudiar lo que ya hay para ver si es suficiente en un principio y, otra, suponer que las medidas del cliente son correctas y usar las políticas de instalación que tiene el cliente dentro de la solución.

Puede plantearse la duda respecto a cómo sale la información de medición para la facturación del servicio. Esto funciona con una máquina virtual en el cliente que ejecuta unos scripts de la herramienta Cloud Cruiser para medir los consumos unitarios que se manejan dentro de la parte del contrato. Esa medición se hace normalmente dos veces al día.

Y luego se factura mensualmente con la media que proporcionan estos datos. Esta información reside en esa máquina virtual que sólo tiene la medición, pudiendo ser consultada por el cliente, el consumo (de terabytes, de procesadores, de memoria, de virtual cores o de cualquiera de las unidades). Eso es lo que aparece en ese fichero.

«El sistema es totalmente seguro para los datos del cliente: no hay un acceso remoto desde fuera hacia dentro del cliente, sólo al revés»

Ese fichero de consumo se cifra y se manda por correo electrónico al centro de servicio que es el que lo compara con el sistema cloud de facturación del cliente. Cada cliente tiene acceso a este dashboard para conocer el estado de consumo así como posibles recomendaciones del sistema. No hay un acceso remoto desde fuera hacia dentro del cliente, sino sólo al revés. Desde el cliente sale hacia fuera esta información con todos los controles y salvaguardas de seguridad que he comentado.

El cumplimiento de las revisiones de seguridad se puede hacer más en profundidad cuando este aspecto sea primordial. Podemos hacer, desde nuestra parte de consultoría, chequeos de seguridad en los que estaremos monitorizando el sistema para poder recomendarle al cliente qué hacer, desde la parte de soluciones.

Hay clientes cuyos propios departamentos nos dan las premisas para ejecutarlo. Y lo que hacemos es comprobar que ese nivel de servicio es factible con esa solución. En otros casos, a lo largo del proyecto hemos ido haciendo auditorías o monitorización de la parte de seguridad para poder ir comentándoselo al cliente. Esos son los dos enfoques que empleamos.

Dado que hablamos de soluciones on-premises, la seguridad perimetral reside en las dependencias del cliente, con la seguridad perimetral que tenga. Es decir, sigue dentro de los planteamientos de seguridad que tienen y con los que están cómodos. No hay ningún dato que salga fuera de ese entorno hacia HPE.

MCPRO: El desplazamiento de cargas de trabajo de la cloud pública a infraestructura on-premises conlleva unas transferencias de información que pueden ser muy voluminosas en la transición y, luego, puede requerir un ancho de banda hasta el Data Center superior al que tenía anteriormente. ¿Cómo afrontáis este aspecto?

Antonio Areses: Cuando hablamos de modelos híbridos el ancho de banda durante el proceso de migración de vuelta. Se hace un estudio de la parte de carga para determinar el ancho de banda necesario. Éste es un dato que en entornos 100% no se suele tener en cuenta, y aquí sí es importante. En el mundo cloud se pone el foco en la potencia de la máquina y la capacidad de almacenamiento y, aunque la transferencia es parte del coste final, el ancho de banda disponible no es algo que suela preocupar, suele estar cubierto.

En España tenemos referencias de Azure Stack As a Service, donde la infraestructura se instala on-premises, pero con el catálogo de venta de Azure. HPE proporciona este servicio, en el que el cliente hace el consumo que necesita y nosotros le facturamos la parte correspondiente del servicio Azure y la parte correspondiente de la infraestructura. En el estudio que hacemos del cliente vemos qué necesidades de comunicación va a haber entre las máquinas existentes del cliente y las nuevas para determinar el ancho de banda necesario.

Hemos visto que, con algunos clientes, al revisar sus datos de consumo en la nube, se encuentran con sorpresas no en la parte de proceso o almacenamiento, sino en el ancho de banda consumido y lo que representa para su coste final.

MCPRO: Para terminar, me gustaría retomar el modelo de relación con el canal del que hemos se ha hablado brevemente al principio. ¿Cómo operáis con el canal y qué aprendizajes se han dado hasta ahora?

Antonio Areses: En el verano de 2018 se lanzó en los EE.UU. el modelo ‘Channel 3.0’ de HPE GreenLake y llevamos aproximadamente un año de recorrido con este modelo en España. El modelo tradicional de HPE ha sido apoyarnos en el canal para el entrar en el entorno de venta SMB de la parte, llamémosla así, tradicional. Este canal nos ha pedido poder participar en este modelo. Se ha creado un modelo nuevo llamado ‘Channel 3.0’ que le permite al canal vender la parte de los servicios de HPE GreenLake al cliente.

Esto le permite al canal disponer de varias mejoras, con varios servicios para poder entrar en ese mercado, por decirlo así, un poco menor en dimensión del que tratamos de forma directa y, además, con unos términos y condiciones que asume HPE en el contrato. Es decir, el partner transmite en su contrato al cliente parte de las condiciones para que sea HPE el que se responsabilice de la parte de servicio en caso de problemas financieros o legales. HPE aparece como el responsable de ofrecer ese servicio aunque sea el canal el que lo venda. Este es el nuevo modelo que hay, y el canal lo está acogiendo con mucho interés.

«El canal nos permite llegar a empresas a las que no llegamos de forma directa»

Ya tenemos algunos ejercicios desarrollados para entornos más pequeños para la parte de trabajo en los que se están dando los business case. Aquí sí que competimos con un mercado más pequeño ‘near shore’ o del proveedor cercano de la parte de servicios, con lo cual hay algunos partners que están trabajando más como proveedores de servicios, son ellos los que están comprando directamente HPE GreenLake para ofrecerle luego servicios a su cliente local. Son dos modelos, uno es el canal de reventa hacia el cliente final, que es Channel 3.0 y otro que sería la parte de service providers, donde estamos trabajando del modo que indicaba. En este último caso, el proveedor puede completar los servicios que ya le proporcionaba a su cliente con este nuevo offering y proporcionar así un servicio más completo.

MCPRO: Y por último, ¿cómo procedéis en un proyecto con un proveedor, es el proveedor quien lo ejecuta, os lo transfiere a vosotros o es algo intermedio?

Antonio Areses: En HPE GreenLake la instalación y el soporte de los servicios es tarea exclusiva de HPE, ya que somos quienes compramos la nueva infraestructura. En todo lo relativo a la integración y la comunicación con el cliente, dependiendo del grado de cercanía que tiene con el partner, al que ya le proporciona otros servicios a ese cliente, es quien suele participar en este aspecto. Existen algunos partners que, al no proporcionar estos servicios en primer lugar, nos lo están pidiendo a nosotros. En este último caso, complementamos al partner en esta función. El modelo GreenLake está pensado para ser un todo dentro de la parte del contrato, otro asunto es la integración con el resto de elementos. Hay partners que están tomando nuestro modelo como parte de la solución a sus clientes, con lo cual ellos eliminan riesgos y funciones que ahora delegan a HPE y complementan el resto de servicios: migración, integración, etc.

Lo más leído