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Un español se «cuela» entre los ’30 under 30′ de Forbes

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Óscar Pierre

Hace solo unos días dedicábamos varias noticias a algunos de los elegidos por la revista Forbes en su «30 under 30» en el campo de las inversiones, jóvenes cuyas decisiones podrán marcar el futuro de muchas start-ups que acaban de nacer e, incluso, que todavía están por llegar. Sin embargo, no hay que olvidar que para que los fondos puedan invertir es imprescindible que exista el ecosistema emprendedor. Y este también suele estar lleno de jóvenes talentos con mucho que decir sobre cómo será nuestro futuro. Así, Forbes también dedica un «30 under 30» a estas jóvenes promesas (algunas ya confirmadas) y, este año, un español ha conseguido ser incluido en ella. Se llama Óscar Pierre, nació en 1992, creó Glovo hace menos de dos años y, en este tiempo, ya ha planteado los cimientos de la que podría ser la próxima gran revolución de los servicios online cooperativos.

Criado en el seno de una familia de carácter emprendedor y empresarial, Pierre estudió ingeniería aeronáutica y, durante unos años, trabajó para el consorcio europeo Airbus en Francia. Sin embargo, y pese al interés de su padre (también empresario del sector tecnológico) en que se convirtiera en ejecutivo de una gran empresa, el espíritu emprendedor fue más fuerte, razón por la que terminó dejando ese trabajo y animándose a crear su propia start-up, una plataforma cooperativa de envíos y mensajería.

La inspiración para crear Glovo surgió, según sus propias palabras, durante una estancia en Estados Unidos, en la que en una ocasión empleo los servicios de Uber no para desplazarse él, sino para realizar un envío. Ya tenía constancia de que los conductores de la plataforma realizaban ese servicio, y algunas referencias positivas, pero realizar la prueba por si mismo le sirvió para comprobar lo efectivo que resultaba. Pero, ¿por qué limitarse a coches?

Así nació Glovo, una plataforma en la que cualquier particular se puede inscribir y, a partir de ahí, efectuar este tipo de servicios para usuarios que lo necesiten, ya sea por cuestión de tiempo, disponibilidad o, simplemente, comodidad. El servicio, que ya está disponible en Barcelona, Madrid, Valencia, Milán y París (con planes de expansión tanto nacional como internacional), conecta a los glovers, que son las personas que se encargan de la compra y el transporte del producto a entregar (desde una hamburguesa a un medicamento) con las personas que quieren dichos productos y los solicitan a través de la app. Al igual que ocurre con servicios como MyTaxi con los taxis, los globers más cercanos recibirán una notificación, por si desean realizar el servicio y, en caso afirmativo, de ellos dependerá el resto de la operación.

De esta manera, esos particulares consiguen unos pequeños ingresos extra (alrededor de 30 euros diarios de media, según Pierre), dedicando a la actividad solo el tiempo que ellos deseen. La empresa, no obstante, está estudiando otras vías de colaboración para aquellas personas que deseen dedicarse a ello a tiempo completo, si bien reconoce que ese no es el perfil que buscan en este momento. Además, el apoyo a la plataforma también está llegando mediante locales comerciales, por lo que todo apunta a que si hasta ahora su crecimiento ha sido muy rápido, todavía puede crecer mucho más, hasta llegar al punto de convertirse en el Uber de los envíos.

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